26 de octubre de 2010

Entrando a saco (y disparando a la cama)



Point Blank (John Boorman, 1967) + Yakuza (Sydney Pollack, 1974).
Dos títulos que me dejaron mudo de niño. Algunos años después todavía creo que…

24 de octubre de 2010

Testigo felino presencia el combate



1972. Aquella familia de gatos quería cambiar de aires. Nada mejor que el Coliseo romano para establecerse y empezar una nueva vida. Pero no contaban en que, esa misma tarde, un chino y un americano decidirán darse de hostias entre columna y columna. La curiosidad mató al gato - dice el refrán - así que papá gato fue a comprobar que aquellos humanos no destrozaran el patrimonio histórico. Visto el percal, papá gato volvió con su familia y les propuso mudarse a la torre de Pisa. Pero mamá gato no estaba dispuesta a abandonar su nuevo hogar. Habían sido muchas horas de maletero como para que ahora dos idiotas les destrozaran el plan. Y se fue corriendo hacia los humanos dispuesta a sacar la uñas, los colmillos y lo que hiciera falta. El chino y el americano seguían mirándose para comprobar que no se habían equivocado de rival y cuando la duda quedó despejada empezaron a entrenar porque vieron que tenían tiempo de sobras. Fueron las patadas del americano y las caras que ponía el chino las que hicieron meditar a mamá gato. Y de pronto pensó que la idea de la torre de Pisa tenía su gracia. Si conseguían el punto justo de equilibrio la convivencia podría llegar a ser confortable. El matrimonio felino empezaba a hacer las maletas cuando comprobaron que bebé gato había desaparecido. Pensaron lo peor y le imaginaron entre los puños del americano o las patadas del chino. Pero hacia ya rato que bebé gato había escogido el mejor sitio para ver el combate. Y dejó claro que no bajaría hasta que uno de los dos hombres cayera.

Bruce Lee se enfrentaba a Chuck Norris en el mítico y silencioso combate final de El Furor del Dragón (Bruce Lee, 1972).

El Starman y el éxtasis


Si yo fuera un E.T. (cosa que no hay que descartar) no creo que tuviera la suerte del Starman. Los yankies derriban tu nave con misiles por si acaso y xino-xano recreas el cuerpo de un atlético Jeff Bridges, que afortunadamente ha muerto y está libre de copyright. Secuestras a su mujer, una esplendida Karen Allen post-Indiana Jones y todo lo que eso conlleva. Porque el Starman puede ser un alienígena pero no es tonto. Y lo mejor de todo. De todas las casas a elegir, te topas con una que alberga un fantástico Ford Mustang Cobra II. No durará mucho pero la excursión con el coche proporcionará aventuras de los más cool. He tardado océanos de tiempo en visionarla y de nuevo sólo puedo soltar un -Gracias Sr. Carpenter.

Bonustrack: Starman es mucho mejor que E.T. por OctopusMagnificens.

22 de octubre de 2010

Aquellas películas olvidadas de Ana Obregón



Te caiga bien o no, te parezca buena actriz o no, sería imperdonable pasar por alto el currículum bizarro que se marcó la Sra. Obregón hace décadas. A lo tonto a lo tonto, además de su famosa aparición en El Equipo A (1985) y un supuesto rollete con Spielberg, compartió cartel con verdaderos animales de la pantalla como George Kennedy, Lee Van Cleef, Peter Cushing o Terence Stamp. No está nada mal. Y rodó con John Derek, Jose Antonio de la Loma, Juan Piquer Simón o nuestro querido Antonio Margheriti. De hecho, sólo por su participación en Car Crash (1981) ya valía la pena soltar estas líneas. Lo de intentar una entrevista a cerca de esta película queda pendiente y tiempo al tiempo. Así que esperamos pronto ese Goya Honorífico que haga reeditar en dvd todo lo mencionado. Mientras tanto, nos acercamos con precaución a La mirada del otro (1997) y su escena con Alonso Caparrós.

Bonustrack: Impagable el artículo de La Página Definitiva sobre Goma-2 (1984).

Ang Lee se parte la caja

“Con Ang Lee hubo muy buen rollo. Una noche le conté un chiste: En español, chocho quiere decir vagina y el diminutivo es chochín. ¿Sabe cómo se dice divorcio en chino? Chao chochín”. Se partía de risa: “¡Chao chochín! ¡Chao chochín!”. Tres semana después me llamaron del festival de cine de San Sebastián para decirme que Ang Lee iba diciendo a todo el mundo: “¡Chao chochín!”.

Se lo cuenta Oriol Rogent (intérprete) a Gemma Tramullas (El Periódico de Catalunya).

18 de octubre de 2010

Vamos al cine con Scorsese



El Scorsese más cinéfilo y autobiográfico aparece ya en su ópera prima Who’s that knocking my door (1968). Harvey Keitel lleva a su novia al cine. Y menuda sesión: Río Bravo (1959) y Scaramouche (1952). Esto sí que es pasión por los clásicos. 33 años después, Richard Kelly nos regala Donnie Darko (2001) y nos ofrece otra super sesión doble con Evil Dead (1981) y La última tentación de Cristo (1988) del propio Scorsese. El círculo se cierra, o casi.



Tras Boxcar Bertha (1972) y un poco antes de llevar a Cybill Shepherd a un cine porno, Scorsese vuelve a retratar el barrio y las bandas juveniles. Los protagonistas de Malas Calles (1973) intentan huir de los problemas y se meten a ver La Tumba de Ligeia (1964). Pero atención al programa. También pueden ver el mejor Corman con El hombre con rayos x en los ojos (1963). Y si ya quieren inyectarse una sobredosis pueden acercarse al Point Blank (1967) de John Boorman e incluso a los Husbands (1970) de Cassavetes. Esperemos que Doc acabe de preparar el DeLorean en breve.

Debo reconocer que…

“Odio emplear la frase “Debo reconocer que”, porque implica una renuncia. Pero por una vez, y refocilándome en ello, la usaré para declarar solemnemente que debo reconocer que una canción de Serrat o Alejandro Sanz me vale por todas las óperas de Wagner, que un film de Tati o Stanley Donen es superior a toda la obra de Fellini, Misoguchi o Fassbinder. Que cualquier función -como él decía- de Miguel Mihura me vale por todo el teatro de Buero Vallejo o Alfonso Sastre juntos. Que entre Sondheim o Brukner me quedo, de lejos, con Sondheim, que entre Delacroix y Rosseau el Aduanero, elijo sin duda a Rosseau. Y que Fernán Gómez es, en el cine español, superior, incluso a Bardem y Berlanga, sus coetáneos y predecesores, y por supuesto, a todos los que han venido después. Sólo lo supera Luis Buñuel. Pero es que Luis Buñuel supera a todo el mundo.”

Jesús Franco en sus “Memorias del tío Jess” (Ed. Aguilar).

Déjà vu de los 17 años

Siguen las señales. Referencias a Audrey II por doquier y una de las puestas en escena más deslumbrantes que he visto nunca. Flashback a un lejano sábado de madrugada: Entre teletiendas y porno de tele local te topas con créditos de Rick Moranis y Steve Martin. La curiosidad decide por ti y caes de lleno en el Da-Doo. Te enamoras de la Audrey original y naturalmente matarías al dentista y tiempo al tiempo. Y si ahora ya todo eso es un déjà vu de ese primer impacto, es curioso comprobar como toda aquella trama ya era un primer déjà vu de ciertas escenas adolescentes presenciadas con anterioridad. Afortunadamente, le temps detruit tout y ahora sólo permanece aquel increíble musical con letras de Howard Ashman y Alan Menken.

Y en lugar de añadir más palabrería sólo puedo y debo añadir un vídeo, el vídeo: Skid Row (Downtown).
Little Shop of Horrors (1986) del gran Frank Oz.

12 de octubre de 2010

“Policromía” en Brigadoon: Festival Cinema Sitges 2010

10 del 10 del 2010. Una fecha señalada allí donde quedan las fechas señaladas. Muchas gracias a todos los que viajasteis en domingo a un lluvioso Sitges. Muchas gracias a todos los asistentes de la proyección: anónimos, amigos, colegas e incondicionales (que algunos hay).

A Gloria por su amable presentación y sus referencias a Val de Omar (!) y a Park Chan-Wook (!). Y naturalmente a R, él sabe por qué. Seguimos viajando a tres colores, sin un rumbo concreto, hasta que el blanco desaparezca, el rojo destiña y el verde se difumine.


4 de octubre de 2010

“Policromía” en el Festival de Cinema Sitges 2010

Domingo 10 de Octubre a las 15:00h, Proyección de Policromía en
Sitges 2010: Festival Internacional de Cinema Fantàstic de Catalunya
Sección Brigadoon (Edificio Miramar). Entrada Gratuita. Te esperamos!