21 de junio de 2014

Non Stop

Una gata egipcia intenta dormir en mi regazo y al principio me da grima tocarla pero cuando se acurruca y me mira lastimosa entonces me olvido de sus pliegues de goma y de su horrible aspecto y por olvidar hasta me olvido de poner comas a todo esto y empiezo a encontrarle ventajas al asunto tales como que no habrá pelos por toda la casa y tampoco habrá paz para los malvados y les aseguro que nada tiene que ver que esté sonando Vince Tempera que era un compositor que lo ponía muy fácil a los cineastas para dar ritmo a los montajes de la misma forma que lo hacía David Shire en esa estupenda cinta en la que secuestran un metro ante el terror de todos los pasajeros menos para esa mujer que se pasa toda la historia durmiendo en el vagón y que naturalmente despierta cuando el drama ya ha terminado y la gata ya se ha marchado.