Sudor, nervios, tensión, ojos como platos, el corazón a mil, la boca abierta, me quito el sombrero. Hacia años que una película no me dejaba tan petrificado. Gela Babluani escribe y dirige 13 Tzameti (2005), un magnífico film del que prefiero no destripar nada, aunque la carátula y el eslogan expliquen demasiado. Hay que verlo. El propio Babluani rueda el remake yanki, y no, no me oiréis rajar del futuro remake. Al igual que Ole Bornedal hizo con su Vigilante Nocturno (1994) y su estupendo auto-remake La Sombra de la noche (1997), es muy difícil hacer una mala versión cuando la materia prima del original es tan y tan buena. Me conformo con lo mismo. Eso sí, Babluani la rueda en color y desarrollará otros elementos de trama. ¿Quizá alguna trama de los jugadores secundarios?. Es la primera vez que espero el estreno de un remake.