Luc Besson no quiere dirigir más películas. Seguirá escribiendo y produciendo pero no volverá a ponerse tras la cámara. Dice que quiere parar ahora que ha dirigido 10 buenas películas. Sus seguidores lamentamos su retiro, pero estamos de acuerdo con él: ha hecho 10 buenas películas, aunque en ocasiones a uno se le atragante su “Juana de Arco (1999)”. Uno de sus mejores trabajos fue “Nikita (1990)”, de la que se realizó el decente remake “La Asesina (John Badham, 1993)” y una posterior serie para TV. Nikita es una delincuente a la que una agencia secreta del gobierno le obliga convertirse en asesina a sueldo. Tras un duro entrenamiento, Nikita empieza a trabajar. Luc Besson sabe como hacer cine y tres de las mejores secuencias pertenecen a las tres misiones de la asesina. En la primera, Nikita celebra su primera salida del centro con una cena en un restaurante de lujo. Pero hay una pequeña sorpresa con ecos de una famosa escena de “El Padrino”. Impecable su realización, así como su desenlace en la cocina. Las otras misiones no merecen ser destripadas en este texto, así que hay que visionar la habilidad con la que Luc Besson traza la misión en Venecia con unos sencillos elementos. La tercera misión se desarrolla en el loft de una pintora y finaliza con la aparición del limpiador Jean Reno. Poco después, Besson rodó de nuevo con Reno la estupenda “León, el profesional (1994), con la primeriza Natalie Portman y el polifacético Gary Oldman. Vale la pena descubrir o revisionar los trabajos de un Luc Besson siempre hábil y potente. Aunque lo del retiro de un cineasta es algo que siempre es bastante dudoso. Confesión: Me divierte terriblemente ese “Wasabi (2001)”, un film escrito por Luc Bessón, con un Jean Reno como protector de su hija asiática. Gracias a GB por descubrirme este film.