17 de julio de 2014

Rubia de bote

Tras la muerte de Fassbinder la bella Hanna Schygulla prosigue su carrera y termina rodando todo tipo de productos y subproductos. Será una verdadera sorpresa recuperar la macarrada de Delta Force (1986) y toparme con esa azafata bondadosa en una primera parte estupendamente secuestrada. Luego ya saldrá un Chuck Norris lanzando misiles en moto, que naturalmente era lo mejor cuando eras niño, y que ahora se presentará como una enorme caricatura involuntaria. Y será que tenía la atención en la Schygulla porque me tendré que esperar hasta los créditos para reparar en que el villano era el gran Robert Forster, aquí convenientemente maquilado como palestino vengador. Punto para los de la Cannon y cero para mi memoria visual.