El resto de la revista no me interesaba demasiado, pero desde niño siempre esperaba encontrarme con ese extraño y silencioso gag a todo color y maquetado a 4 viñetas. Lo firmaba Krahn y siempre aparecía al final del magazine. Era el último pero para mí siempre será de los primeros. Gracias por todo, maestro. Fernando Krahn (1935-2010).