Agito los elementos y me sale un cóctel de gatos serenos con unas gotas de Daft Punk. Del reciente Touch al célebre Da funk, el primer maullido electrónico que, paradójicamente a todo esto, protagonizó un perro dirigido por Spike Jonze. Y como la teniente Ripley ante el inoportuno monstruo, seguiré deseándome suerte ante los peligros inminentes. Un poco de suerte.